miércoles, 19 de septiembre de 2018

Late bloomer (o cómo resignificar la llegada de los 40s)



El término "late bloomer" (al que podría traducir como florescencia tardía), hace referencia a una persona que se ha desarrollado más tarde de lo que se espera estadísticamente. 

En todos los ámbitos, culturales, artísticos, políticos, educacionales, etc., existen personas que han comenzado o llegado a un punto culmine en una edad mayor a la esperada. Leonard Cohen, Alan Rickman, Bryan Craston, JK Rowling y muchos muchos más.



Pero más allá de la calidad en su oficio, es la parte estadística la que juega un papel preponderante cuando hablamos de un late bloomer. A los seres humanos nos encanta, por muy odioso y poco útil que sea, compararnos. Entonces vemos que si el vecino que tiene 25 años ya posee un negocio y un auto más moderno, nos sentimos menos. O que si el hijo de tal aprendió a leer antes de tiempo, lo felicitamos y comparamos con los infantes propios o conocidos. Pobre de ellos. 

El problema de esto es que finamente se juega contra un promedio, una comparación que no aporta nada, sobre todo al entender que el desarrollo  cuanto a los "logros" de la vida, esos no están escritos más que en una sociedad odiosamente comparadora. 

Seguramente te has comparado antes. Todos lo hemos hecho. Y lo más probable es que saliste "perdiendo". O si te sentiste "ganador", luego viste o te enteraste que otra persona te llevaba una ventaja insalvable. ¡Bienvenida frustración! 




¿Cuál es la gracia entonces del late bloomer? que intencionalmente o no, ha esperado más tiempo para llevar a cabo sus ideas, proyectos o lo que sea. Quizás no tuvo los recursos antes; tiempo, dinero, o la madurez necesaria. Pero eso no importa, porque tampoco se compara ni se frustra por llevar la vida a su ritmo. El ritmo de tu vida es tu propio ritmo, no el de la sociedad, no es el de tus padres, ni de tus hermanos, conocidos ni amigos. 



Si te vas a comparar, hazlo contra ti. ¿Llevas 10 años cometiendo los mismo errores? bueno, hay algo ahí compañero que debes revisar.


martes, 4 de septiembre de 2018

7 Peligros de la pista lenta


Ok, estás en la pista lenta. No gastas mucho ya que estás (si puedes) ahorrando. Todo es para mañana, para un futuro mejor.

¿Te cuento algo? no es un buen negocio. Mira cuáles son los peligros de la pista lenta.


  1. Salud. Debes vivir lo suficiente para disfrutar de tus ahorros.
  2. Trabajo. Debes trabajar en un lugar en el cual puedas ascender.
  3. Hogar. Las bienes raíces como inversión pueden sonar bien, pero puede desplomarse su valor.
  4. Compañías. Trabajo, pensión o inversión... las compañías siempre pueden quebrar.
  5. Estilo de vida. Deberás controlar tus tentaciones. Fome.
  6. Economía. La recesión o depresión económica puede afectar los ahorros o inversiones.
  7. La vereda. La frustración puede hacer que la persona vuelva a transitar por la vereda, dilapidando sus ahorros.