viernes, 30 de abril de 2010

La Calumnia del viernes. 30.04.2010




La Calumnia de los viernes

Primera calumnia. Primera vez. Siempre hay una primera vez para todo... y para todos.

Si hay algo que detesto es una frase cliché, sobre todo cuando se utiliza para apoyar emocionalmente a otra persona, o cuando se desea justificar algun error. "Sólo Dios sabe". Creo que la unica vez en que esa frase ha sido bien utilizada, lo hizo Brian Wilson en "God only knows".

Sólo Dios sabe lo que sería sin ti.

Es viernes, no son todavía las 18:30 y estoy haciendo hora en el trabajo realizando esta catarsis de la semana. Una muy mala semana. Pero una semana no tan mala si la tomo en comparación con los últimos dos meses. Sólo dos porque además del terremoto, no recuerdo otras cosas significativas. Sólo un par.

¿Sabian que Ghandi se acostaba con mujeres desnudas para probar su entereza?. Así pues, el mísmisimo Mahatma.

Dicen que Hitler se acostaba con Churchill a un lado, y Mussolini al otro. Habrasé visto. "Ábrase y lo visto", le decian.

Tengo en la mente esta frase: "Looking for a **** job, for a real job".

Espero que con el tiempo esta calumnia empiece a tomar forma. "Sólo el tiempo lo dirá".

De momento estoy convencido de que esta semana no ofreció nada nuevo, ni bueno. No recordaré en 10 años más... "si, aquella última semana de abril del 2010... fue muy especial".

Hay una sola cosa que brilla en el espacio. Gira, brilla, da vueltas y rie. Y no pretendo perderla.

Hasta la próxima semana, pasenlo bien.

lunes, 19 de abril de 2010

Perseverancia


Creo en este concepto. Lo vivo hoy, lo viví ayer, y obviamente, por ser perseverante, lo viviré mañana, ya que es un concepto netamente futurista. Uno persevera para alcanzar algo, un algo que no tiene en las manos en este momento. El presente no alcanza y el futuro no espera. De nada sirven las esperanzas. Desde que nací, con más de 9 meses en un liquido amniótico amarillo y vencido que puso en peligro mi vida y la de mi progenitora, desde la meningitis que me obligo a aprender a caminar nuevamente a los 4 años y no quedar con secuelas. Desde el SDA que me pone vallas cada día, las que debo aprender a sobrepasar. Cada día se trata de seguir adelante, contra todo. Sin vacaciones, sin dinero, sólo con la fuerza que me entrega querer llegar a algo. No puedo dormir, no puedo descansar, el mañana quizás no existe, pero si sale el sol ahí estaré, al pie del cañón.